Algunos de nosotros hemos optado por caminos tal vez nunca antes visto. Esto hace que la incertidumbre nos arrope. Esto hace que seamos perezosos para estar en contacto con nuestro “Yo” interior. ¿Sabes? Hay algo muy valioso en nuestras vidas que se llama búsqueda. Es establecer ese contacto sublime con lo más profundo de nuestro ser.
Muchos de nosotros creímos en algún momento de nuestras vidas estar en el lugar equivocado, pensando, que las oportunidades son meramente casualidades, pero que tal si empiezas a descubrir que eres útil, posees talentos, habilidades nunca antes vistas y todo se desplaza a construir una vida más significativa y con mucha esencia, te aseguro la respuesta será otra.
Anda atrévete a creer, crecer, buscar, reconocer y aceptar aunque a veces este caminar “parezca cuesta arriba”. Por último te relato un consejo que me dio un buen amigo diciendo “mientras estés en lugar determinado sácale el mayor provecho ya sea circunstancia, escenario, experiencia de vida o como le quieras llamar “.
Cito unas palabras de Rafael Prada en su libro Profundamente Humano; pág.66, segundo párrafo dice:”cuando existe un ambiente de ayuda mutua en el que todos exteriorizan sus sentimientos, pueden encontrarse las mejores posibilidades de autoexamen”.
En la profesión docente apenas hemos empezado a explorar y a usar los recursos para incrementar el conocimiento propio que las personas podrían adquirir en sus relaciones mutuas. Las reuniones de profesores, de comisiones especiales, los seminarios y los grupos de discusión o mesas redondas pueden tener otros fines provechosos, como el conocerse a sí mismos, evitando fingir que se tratan los asuntos de una forma puramente racional”. Vale seguir dando lo mejor de ti para que ese hábitat siga balanceado tanto física, mental y espiritual.
